29 de abril de 2008

AMANECER EN TENANGO DE DORIA

Una de las artesanías que en realidad merecería el nombre de obra de arte son los célebres tenangos, llamados así debido al municipio que les dio origen: Tenango de Doria, estado de Hidalgo y más concretamente la comunidad hñahñù de San Nicolás donde entre los años de 1920 a 1930 surgieron estas maravillas textiles únicas y asombrosas por su colorido llenas de vistosas figuras de flora y fauna fantástica en las que se prescinde de figuras antropomorfas. La elaboración de estos lienzos se regionalizó para convertirse finalmente en uno de los productos más originales que tiene la entidad para el mundo entero.

Conocimos a un matrimonio –formado por la Señora. Maria. Angélica García López y Manuel Tolentino Mendoza- que se dedica a esta industria, en abril de 2006 abrieron su casa artesanal que es muy visitada por el turismo nacional e internacional. Ellos fabrican 5 piezas básicas de distintos tamaños que van desde carpetas, centros de mesa, manteles y otros donde plasman increíbles animales en excitantes combinaciones de colores, si bien recientemente también pintan y bordan otros objetos de uso cotidiano como monederos, portavasos, blusas, chalinas, faldas y camisas entre otros.

La elaboración de tenangos –según nos explicaron- es un proceso no muy complicado pero sí muy laborioso que en ocasiones requiere de más de 10 meses de trabajo. Primero se elige la manta blanca o de color que es la tela tradicional, después doña Angélica dibuja o pinta las figuras, esto lo hace con imaginación libre y nunca ha hecho una figura parecida a otra, a menos que sea un encargo de algún cliente en donde tiene que hacer uso de la calca. Aquí hay dos modalidades: una si el dibujo se tiene que circunscribir a un espacio delimitado y la otra donde hay libertad para plasmar lo que su gusto y ánimo le aconsejen.

Después viene el bordado, para ello la señora García tiene muchas costureras que trabajan en sus propias casas, aquí también juega un papel importante el gusto de las muchachas o señoras para entrelazar los colores que son muy vivos y llamativos. En este paso se utiliza hilo vela el cual se compra directamente de fábrica en madejones de 250 gramos.


Da mucho gusto conocer a personas tan emprendedoras, amantes y dedicadas a su trabajo pues si bien es cierto es un trabajo muy mal pagado la satisfacción de producir un tenango en forma, simplemente no tiene comparación. La señora Angélica García aprendió el oficio de su mamá, quien a su vez lo heredo de la suya, desde los 5 años de edad comenzó a bordar y a los 13 comenzó a confeccionar aunque al principio no lo hacia por gusto sino por necesidad, tiempo después compró su propio material y el ICATHI la invitó a un curso en el año 2002 en donde perfeccionó sus técnicas de dibujo, bordado y confección y ahora es una de las más sobresalientes artesanas en este producto y comenta con orgullo que esa habilidad y talento que tiene: “Es un don que Dios me regalo y nadie más me lo puede arrebatar, solo Él”

Por otro lado, es cierto que a las niñas del municipio no les interesa mucho dedicarse a esta industria, empero la hija de doña Angélica, Guadalupe Arizbeth de 6 años de edad ya ha hecho algunos bordados. La propietaria del taller ha participado en algunos certámenes organizados por la presidencia municipal, en agosto de 2006 ganó con un diseño creado por ella y en 2007 obtuvo el primer lugar en la modalidad de ropa infantil. Aún más en abril de 2007 fue invitada como expositora a una feria que se celebró en Arkansas y en mayo del mismo año participó en otro evento parecido pero en la ciudad de Miami.

Estas producciones son espectaculares, alegran los sentidos, motivan a la imaginación pero no son del todo valoradas, mucha gente prefiere ropa, corbatas o camisas de las cuales explica doña Angélica el cuello es muy difícil de bordar por la rigidez que tiene. También fabrica rebozos de lino deshilado en donde plasma alcatraces u otras flores, aves y otros animales desbordados de imaginación e ideas sugestivas que atrapan al espectador.


Aun así son pocas las personas que se dedican a esta artesanía –de hecho sólo son cuatro casas artesanales-, no reciben apoyo de ninguna instancia gubernamental y ni siquiera están organizados en agrupación, pero mientras existan personas como doña Angélica el patrimonio cultural y costumbrista del estado de Hidalgo esta a salvo.

Por otra parte Tenango (que significa “Lugar amurallado”) de Doria tiene otras tradiciones como la del tres de mayo en que las familias hñahñús van a danzar al Cerro Brujo para pedir que llueva, es una ceremonia que ya tiene mas de 100 años de tradición.

Dentro de los platillos típicos encontramos el trabuco que es una masa que se extiende en una hoja llamada papatla a la que se le agrega cacahuate molido, hierba de olor o cilantro a veces lleva carne deshebrada o chile mora y se cocen con manteca o aceite.

Algo que nos comentaron que me parece distintivo es que en la comunidad de El Bopo organiza su carnaval previo a Semana Santa con mucha comida, bebida, danzas y trajes para esto se eligen dos mayordomos por día quienes son los encargados de agasajar a propios y extraños en ocasiones se acompaña el festejo con la incomparable música del huapango hidalguense.