Hablar de tres o cuatro municipios del grandioso estado de Chiapas, sería como no hablar realmente de la grandeza que el estado tiene.Las maravillas naturales de la entidad son sobradamente conocidas, en tanto las maravillas culturales lo son, por su repercusión y por la gran presencia que en materia de turismo cultural, representan para México.
Hablamos como ejemplo de Palenque o de San Cristóbal de Las Casas, dentro de las muchas maravillas naturales y culturales que tiene este gran estado. Creo que el plus es la gente, pues todos te tratan súper bien cuando visitas el gran estado del sur, que por cierto fue el primero que se anexó a México en el tiempo de las indefiniciones políticas de Latinoamérica.
Chiapas tiene tanto, que nos hace morir de envida a los que no lo tenemos. Pero al mismo tiempo nos hace engrandecernos por la ecodiversidad y otros grandes beneficios que por su naturaleza, exigen respeto.
Robamos en unas fotos, algunos momento de eternidad relacionados al gran Cañón del Sumidero, del cual se dice que los indios venidos de Nicaragua llamados chiapas, perseguidos por los españoles, prefirieron arrojarse al río –hombres mujeres, ancianos y niños-, de una impresionante altura antes que caer en las manos salvajes, ambiciosas crueles e invasoras de los malditos conquistadores. De ser cierta esta teoría, pues que admirable voluntad tan férrea, y que coraje por sobrevivir a la fe, respecto a los que nos han quitado todo, Dioses y hasta la lengua. Los demonios del poder no los vencieron.
Estuvimos una semana completa en la incomparablemente bella ciudad colonial de San Cristóbal de las Casas, la antigua Ciudad Real española llena de iglesias y de arquitectura vernácula, y donde estuvo el infinito y único fray Bartolomé de Las Casas, y un día completo en Chiapa de Corso con su formidable kiosco morisco que representa a la corona de la virgen del Carmen y también en la moderna ciudad de Tuxtla Gutiérrez.
Pero lo que más me gustó de este grandioso estado tierra del jaguar, fue la parte de los altos, específicamente el pueblo San Juan Chamula, sus tradiciones, su cosmovisión, su religiosidad a su manera y el increíble sentimiento místico que tienen. Sus artesanías son únicas, las mujeres visten con faldas teñidas de negro elaboradas con lana de borrego uno de los animales sagrados.
Ellos no rezan a la usanza católica tradicional, sino que cantan en lengua tzotzil unos acercamientos profundos con Dios y con los diversos santos que tienen en los laterales de la iglesia, cuya arquitectura es de estilo colonial.
Esta iglesia sustituyó a la antigua de San Sebastián, que no tiene la disposición de cruz latina y de la cual sólo se conservan los paredones y parte de la fachada que es muy bella en realidad. Enfrente se encuentra el panteón que no tiene barda perimetral y está justamente en los caminos peatonales. No hay lapidas y sí cruces de madera de múltiples colores que sobrecogen el ánimo e invitan a la reflexión sobre el paso temporal en este mundo.
El pueblo de origen maya resguarda el sincretismo religioso en su iglesia, el templo y recinto más importante de culto para los lugareños. Se puede acceder a su interior tras una cuota con la condición estricta de no fotografiar o filmar el espacio místico, la prohibición se explica en el boleto de ingreso en inglés, francés y español. La restricción se debe a que las fotos pueden robar parte de la espiritualidad de los santos o incluso el alma de los difuntos a quienes se venera aquí.
No hay bancas ni sillas y los creyentes vierten su fe de rodillas y con los cantos que sirven de oraciones tan emotivos que sacuden la conciencia de cualquiera. Se ven en el interior cientos de velas de diferentes tamaños que representa las ánimas de los antepasados. Los curanderos llevan pox que es un tipo de aguardiente que se obtiene por la fermentación del maíz, hay que recordar que la región es eminentemente productora de esta planta bendita para nosotros los mexicanos. Ahí lo toman hombres, mujeres y niños en un acto de dialogo con el ser supremo. También ofrendan pepsi cola y llevan gallinas que degollan en el templo a cambio de la salud de algún enfermo.
Yo pude contar cuarenta nichos donde se alojan otros tantos santos a los que se le hacen todo tipo de peticiones a cambio de las ofrendas ya dichas. Ahora, si el santo no cumple con el milagro, entonces se le pone de espaldas por un lapso de tiempo. Los santos tienen un espejo que sirve para reflejar la maldad de quien lo ve.
Las velas de diferentes tamaños y disposiciones se ponen en tres grupos que representan a Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo. El piso está totalmente cubierto de uncía que son los ramajes del pino que tienen la función de aromatizar el recinto y darle ese sabor mágico que ya de por sí tiene el lugar.
Las velas y obscuridad le imprimen un misticismo muy difícil de explicar y acaso de comprender, luego las velas ya sin cera son apagadas con saliva.
Los canticos parecidos al om de la india (que equivale al aleluya en los cristianos) se repite día y noche por las familias indígenas fervorosas, lo cual apachurra el corazón de cualquier ser sensible.
No obstante hay patanes que tienen cero respeto por los demás y creen que por tomar una foto del interior, son felices por violar el respeto de los demás como en el caso de este señor que se enorgullece de tomar una foto en el interior del templo, se puede ver su “hazaña” en http://www.sexovida.com/arte/chamula.htm link al que yo no recomiendo que se le de click, pero lo pongo por estricto rigor informativo.
Las peregrinaciones son el estimulo visual- afectivo más emocional que puede tener en San Juan Chamula, (chamula significa agua espesa), sobre todo en la fiesta de Santa Marta y Santa Magdalena, otras patronas de la comunidad, las cuales se visten de hupiles tradicionales y se llevan en procesión por las principales calles del pueblo. En estos días las autoridades visten sus trajes de gala o ceremoniales
Existen casos documentados respecto a que cambiar de religión o dejar de votar por el PRI, se considera un delito, aquí pocos protestantes tienen éxito, pues los católicos tradicionalistas, tienen preeminencia y luchan contra todo con tal de conservar sus tradiciones. Sin embargo es paradójico, pues mientras los chamulas protegen su sincretismo religioso, maya-catolico, la iglesia católica desaprueba esos conceptos y no existe sacerdote católico en la iglesia, pues consideran que las ideas rebasan a la universalidad católica.
Yo creo que hacen bien en tener sus costumbres tan arraigadas y la defensa que hacen de ellas. Ceo que no se vale imponer el maldito modelo occidental en otras culturas y bien por los chamulas que tienen lo suyo (son una sociedad de auto consumo, el mercado es para ellos), La santería, las velas y el pox se producen ahí mismo, y me encanta que existan pueblos tan mágicos que preservan sus tradiciones a voluntad y que no se dejan permear por la proterva globalización. ¡Viva México!!
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2 comentarios:
Hola Alvarín que emoción senti al ver las fotos y el leer el acertadisimo comentario que haces de nuestra visita a Chiapas, recorde toda esa maravillosa semana mágica, como siempre tienes toda mi admiración y mi respeto, escribes magistralmente bien.(Lupis)
la verdad nose como puedan haber personas que ce pasean tanto con dinero del pueblo y que otros tontos le den por su lado a ese cabron
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