
Por primera vez en casi quince años, no pudimos celebrar este gran acontecimiento con el tradicional maratón de muchas horas donde había invitados, grupos, segmentos especiales, entrevistas y desde luego los múltiples premios para nuestro auditorio.
Sin embargo el aniversario numero veintidós del programa no deslució por falta de entusiasmo obsequios importantes como DVD’s, playeras, calendarios, y el insuperable anuario que se convirtió ya en un autentico disco de colección por su importancia y calidad. Además tuvimos el inigualable e impagable calor humano de grandes, incondicionales y verdaderos amigos que dieron el punto culminante a un esfuerzo de tantos años.
Un ejemplo que no es el único, es el riquísimo pastel con velas que nos envío Elena Verty (¡gracias linda!) a través de su mamá, lo que nos orilla a concluir que así como hay gente con algún tipo de celo, también la hay con un corazón muy grande, más grande que todos los sentimientos confusos del ser humano y eso nos mantiene de pie.
En nuestra gran fiesta estuvieron parte de los grandes pilares de este sólido edificio como Carlos Torres, Cristian Arambula, Miguel Darío y viejos y nuevos amigos como el gran Francisco Pérez Guzmán, una verdadera leyenda entre los fans de mis Beatles, Alejandra Moncayo, Guillermo Spinola, Diana Karen, Diana Jurado, Nancy Montserrat, Fernando Coiffier y muchos otros amigos nuevos que nos demostraron su gran solidaridad.

Personalmente yo me sentí muy a gusto por ver el entusiasmo y cariño de tanta gente por algo que repito, es de todos nosotros, pues sin el público que es realmente lo importante de todo esto, el programa no sería nada.
Me quedo con el compromiso de insistir en que pronto podamos recuperar lo perdido, me refiero al tiempo aire que es lo único con que contamos, pues en este noble trabajo NADIE de los que hemos participado, jamás lo hemos hecho con otro fin distinto que el amor y la calidad al arte, es decir por puro gusto, eso no cuesta, no vale dinero, pero si requiere un reconocimiento formal, apoyo y respeto de quien puede darlo. Nosotros, la gente y los que hacemos el programa, estamos de acuerdo en la diversidad de los contenidos de radio, sobre todo de la radio pública, pero no CUALQUIER programa cumple 22 años sin costo para nadie y sí con todo el gusto de una gran parte de la comunidad. Es más no cualquier programa cumple 22 años. Menos con la calidad que le hemos imprimido al programa al traer entrevistas y grabaciones exclusivas de Argentina, Inglaterra y otros lugares todo con el fin de enaltecer el trabajo de los hidalguenses. Todo por intentar ser el mejor programa de radio al respecto aunque sabemos que es una tarea realmente muy difícil.
Creo que son supuestos que se debieran valorar un poco más y repito, no para mi, pues yo tengo la música y la puedo escuchar cuando pueda, sino para la gente que ya tiene el hábito de la buena radio y por ellos, porque me lo han pedido, es que he escrito lo anterior.
Aquí he dado mi vida, y la seguiré dando; y todavía más si tan sólo cuento con el apoyo de alguien.
Termino parafraseando al gran John Lennon:
Puedes decir que soy un soñador
Pero no soy el único,
Espero algún día te nos unas
Y entonces el mundo será una unidad
(Imagine, 1971).