13 de julio de 2007

ESTUDIO SOBRE UN LUGAR LLAMADO MIEDO MAYOR

Un historiador cuyas iniciales eran A.J.L. cansado de historiar a grandes hombres, grandes pueblos y grandes hazañas, decidió escribir sobre un terrible lugar lleno de miseria y soledad, en donde aún los despojos y basura, eran considerados entre los que vivían ahí, como bienes de gran valor, por lo que seguido se enfrentaban entre ellos -como perros furiosos y violentos-, todo por arrebatarse pequeñas cosas que para nosotros serían insignificantes, tales como momentos, palabras, suspiros, miradas, canciones, atardeceres, saltos de un perro, el toque de un dedo a la intimidad femenina, alguna atención humana, una canción con o sin poema, el canto de un pájaro al amanecer, un sentimiento festivo y en fin muchas cosas para las cuales el dinero sirve de bien poco. Algo especial en ellos son los cuartos vacíos, metafora que yo interpreté como los seres queridos que ya no están con ellos. Sustancia que al final volverá con Dios como un yo-yo. Sensuales y sensualistas regresarán a la mano del Gran Inventor.

Además, si añadimos que en ese raro lugar no había mucho dinero circulante, por lo mismo no había mucho que necesitar, a no ser la comida y el amor. “Pero esto es más bien instintivo que razonado” dijo el historiador en el prólogo de su valioso documento.

Eran los habitantes de este poblado, -dejó explicado el historiador en el escrito que descubrí y hoy presento- , más que animales, pero menos que humanos. Vivían en un caserío formado de desperdicios, lúgubre, falto de sanidad y coherencia. Este fue un pueblo a quien el historiador puso el nombre de Miedo Mayor, nunca se supo el porque de tal bautizo.
Sin embargo he aquí el precitado texto donde viene íntegra esta fantástica descripción:

“Miedo Mayor es un lugar donde casi nadie quiere ir. No, no es la muerte, pues los que viven aquí, también tienen miedo a morir y respetan mucho al cementerio que está en la curva de la carretera. Miedo Mayor es como un pueblo de puros barrios pobres donde no hay jardines, calles, ni cines, sólo mucha pobreza y sólo hay para divertirse una casa embrujada a la que llaman bar donde acuden los dolientes a buscar curación para los sinsabores de la vida, que ciertamente aquí, son muchos.”

“Esta casona apesta a historias rancias, a encuentros y desencuentros, apesta a vejez y si pone uno atención, casi se pueden oír todavía las risas de la noche anterior que encubiertas entre los rincones más insólitos, se aferran todavía más a sus queridos escondrijos para no caer al piso. Entre las grietas de los muros sucios también se ocultan algunas lágrimas bien disimuladas, aunque son las menos.”

“Los que viven en Miedo Mayor, -campesinos, obreros, comerciantes, desempleados, poetas, pintores, federicos, álvaros y pobres en general,- también tratan de sonreírle a la vida a pesar del nuevo día que tienen que enfrentar con hambre y otros problemas. Los ricos del otro pueblo despiertan y dan gracias a Dios por un nuevo día, le piden al Creador no enfermarse y viven buscando mejorar su vida y hasta piden en sus oraciones por los pobres que no son como ellos. Por otra parte, los habitantes de Miedo Mayor despiertan y se quejan con el Todopoderoso por no tener forma de conseguir lo indispensable para subsistir. Sólo se preocupan por comer y tener sexo al que le llaman hacer el amor sin tener pensamientos más altos.”

“Entre los fangos de Miedo Mayor (pues no podríamos llamarles calles), caminan entre otros, la Tristeza, que burlona anda contando historias inverosímiles, como aquella de cuando la Razón, -ebria durante tres días-, dijo que Dios no existía, salpicando de paso al arrabal de lodo e incertidumbre.”

“Los habitantes de Miedo Mayor también tienen fantasmas y dicen que son terribles, aunque casi nadie puede creer esto, ¡¡cómo si los fantasmas no pudiesen tener sus propios fantasmas!!
Miedo Mayor es un lugar de personajes absurdos: locos, sabios, filósofos, vagabundos, borrachos, prostitutas y enamorados (casi todos son esto último), gente baja y loca,(si es que se les puede llamar gente), que beben de la misma copa corriente y solo se distinguen de nosotros porque no tienen dinero, bienes materiales ni salud o pensamientos evolucionados.”

“Miedo Mayor es un lugar que aflige mucho pues ahí nunca sale el sol y a lo mejor por eso sus criaturas son deformes, pero eso a nadie le importa pues como no hay mucha luz, casi no se pueden ver muy bien entre ellos, además no tienen contrastes estéticos, pues nunca han visto a una persona normal y para ellos algunas mujeres feas son de lo más atractivo. Puede ser que no les parezcan bonitas a ellos, pero a lo mejor son muy seductoras, simplemente porque son, mujeres.”

“Las hembras que bailan en el salón maldecido están y son sucias por naturaleza, pero se mueven (si bien grotescamente), sólo para divertir a los hombres pobres, quienes sin dinero, tampoco tienen mucho que ofrecer, unas buscan pan, otros placer y lo buscan en este pantano oscuro, frío y maloliente donde desgraciadamente les tocó vivir. Es un lodazal castigado por los seres humanos, que no por Dios. Todas las creaciones sociales las inventan los ricos, los pobres sólo las imitan pues creen que es lo mejor que hay que hacer en este derrotero que los que sabemos, le llamamos vida, ellos ni siquiera saben que es esto que les pasa minuto a minuto tiene nombre, nombre que nosotros inventamos. (No tienen noción ni al menos del tiempo), pobres.”

“Ellos sólo se parecen a nosotros en que ambos sentimos amor, pero lo que en nosotros es erotismo refinado, en ellos es sexo vulgar; lo que en nosotros es ironía rebuscada y de buen gusto, en ellos es cinismo ignorante; lo que en nosotros es búsqueda esotérica, en ellos es borrachera mordaz e injustificada.”
Para acabar con esta tesis perfecta, digo, que ellos no pueden escribir de nosotros, pero nosotros sí podemos explicar la conducta de ellos, los pobres.”

“Para complementar mi investigación la cual dejo plasmada en estos apuntes, digo que hice algunas entrevistas a los habitantes de Miedo Mayor, el lugar que de no ser por mi, nadie más se habría enterado de su existencia. Primero le inquirí a una habitante de las muchas que merodean por aquí (que para ellos era una joven), sobre que pensaba ella de Dios, ella comentó, (si es que a eso se le puede llamar comentar), que para ellos Dios era un Solitario que durante un día de aburrimiento inventó al mundo y a sus inquilinos los cuales pagamos (dijo ella, yo no lo comparto, claro), una renta por dormir temporalmente en esta casota. Le pregunté a otro de los extraños vecinos del pueblo, sobre lo que él pensaba, (si es que ellos pueden pensar), respecto a la trascendencia humana; le expliqué, (si es que ellos pueden entender), que la conciencia que Dios nos dio, (para entender, darse cuenta, distinguir, saber y sentir que uno está vivo, entre otras cosas), (si es que a lo que ellos les pasa es vida), viene del pensamiento, el pensamiento viene de una actividad cerebral inducida por las neuronas y las neuronas trabajan sólo en seres pensantes y vivos, al morir éstas, también cesa la reflexión y desde luego, la conciencia. Si no hay conciencia, no sabe el ente que vive, pero tampoco NO sabe que NO vive, no sufre ni goza. El pensamiento y la idea de esta absurda especulación, está construido de esperanzas, de sustancias inmateriales pero reales, es decir, el pensamiento aunque abstracto, existe por sí, y el único testigo es la Fe, que fanática se aferra a creer en otra vida.

Le pregunté al ser espantoso que entrevisté, yo con libreta para apuntar sus reacciones que posiblemente no merezcan este estudio tan profundo, sobre lo que mi mente erudita me empujo a concluir, pero el muy cretino carente de criterio y conciencia me respondió (si es que a eso se le llama responder): “No tengo miedo a dormir, más bien tengo miedo a no despertar” (Já!como si ellos pudieran tener miedo).

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Es una gran historia pero al leerlo creo que se asemeja un poco a la realidad aunque algunas personas no quieran verla y solo busquen lo "bueno" de la vida para sentirse felices olvidandose de que existen personas en este mundo que necesitan de nuestro apoyo y se que no necesitas ir muy lejos para encontrar a alguien que ayudar. (NANCY)

Anónimo dijo...

Es una gran historia pero al leerlo creo que se asemeja un poco a la realidad aunque algunas personas no quieran verla y solo busquen lo "bueno" de la vida para sentirse felices olvidandose de que existen personas en este mundo que necesitan de nuestro apoyo y se que no necesitas ir muy lejos para encontrar a alguien que ayudar. (NANCY)

Anónimo dijo...

Es una gran historia pero al leerlo creo que se asemeja un poco a la realidad aunque algunas personas no quieran verla y solo busquen lo "bueno" de la vida para sentirse felices olvidandose de que existen personas en este mundo que necesitan de nuestro apoyo y se que no necesitas ir muy lejos para encontrar a alguien que ayudar. (NANCY)