El solipsismo es una palabra fácil de entender si se recurre a internet para conocer su significado. Pero aun después de conocer su definición, creo que pocos se
sientan a tomar un café o una cerveza y a meditar sobre el concepto. Es verdad,
el solipsismo es una creación filosófica o un modo distinto y acaso original de
ver la vida. Solipsismo es una teoría de la existencia que asegura que sólo
existe uno, uno que está diciendo esto. Es decir, que todas las realidades
abstractas son producto de la propia mente. Todo lo sueño yo. Nada existe si mi
mente no lo imagina. La realidad objetiva es inconsistente en caso de que ésta fuera real, solo es comprensible a través de
mi mente.
Sinceramente es bella pero inquietante esta teoría. ¿De
verdad todo lo estoy soñando yo? ¿O es un dios el que me está soñando a mí?
"La vida es un sueño", obra de 1635 de Calderón de la Barca apuntala
el pensamiento solipsista cuando el protagonista, Segismundo, encerrado desde
que nació, en una torre, se pregunta si es real el mundo que ve a través de la
ventana y las rejas, o a lo mejor esta vida en realidad no es más que un sueño. La
vida o lo que creemos que es vida depende de factores, uno de ellos es salir de
la torre y conocer otros pensamientos. Por ejemplo, todos conocemos que los judíos
existen y tienen poder, pero hasta que se le conoce a uno de ellos se puede
tener una certeza medianamente aceptable.
El solipsismo implica que cuando uno muera, de alguna forma
se acaba la vida o lo que uno cree que es la vida. Uno imagina que después de
muerto la vida continúa, que vendrán otros a formar capítulos nuevos al libro
ya escrito.
Que el tuzobus tendrá más líneas, que el PRI dejará de
gobernar, que la selección mexicana de futbol ganara un mundial, que al pueblo
culto de México le importa un pito lo anterior. Pero sólo son construcciones de
la mente. Que los prejuicios como el valor de la virginidad son sustituidos por
el gran concepto del ser humano. Que Televisa no existe y si existe ya deja de
embrutecer al pueblo. Todo lo anterior son especulaciones, son deseos reprimidos,
son fantasmas de la mente. Quizá y a lo mejor sólo por eso, la filosofía es la
madre de todas las ciencias, aunque no de para comer, pero es importante
reflexionar un poco sobre las bellas piernas de la chica que está detrás de la
butaca del cine. O sobre el pordiosero que pide limosna, o sobre la bruja que
obtuvo todo prostituyendo su cuerpo y alma para alcanzar su felicidad escondida
entre las minúsculas partículas blancas de la arena, y azul turquesa del mar y
el cielo. Son valores que se llevan en el alma. Se trata del alma. Todo es un armastote
cultural e ideológico: ser guapo, joven, culto y rico. Un príncipe de cuentos
bobos. Escritos para robar y apoderarse de mentes débiles.
Pero todo eso es una vil imaginación, un maldito sueño, según
los solipsistas.
En esta hermosa foto donde no se muestran traseros ni
chichis de mujeres, se ve al personaje más importante de Pachuca, no es el
presidente municipal ni algún político que vive del erario. A este admirado señor, tengo la fortuna de conocerlo desde hace más
de veinte años, y sigue igual. Aportando al mundo. Uno es burgués, el otro es
un hippie extremo, que al verlo en su minuciosidad y extremo pensamiento, se le
caen a uno los calzones de vergüenza, y hasta se ofende al término hippie si
uno se quiere etiquetar como tal. Uno, es uno más que no pasa hambre, que su problema es meramente ideológico por que el otro tiene poder de decisión, y hasta pareciera que sus opiniones son mejores que las de uno.
La foto es hermosa por las burbujas y la gente cotidiana que
solo quiere vivir y no pensar. Yo quisiera entrar al mundo de este mi
personaje, pero no puedo, según el solipsismo, todo lo estoy imaginado yo. Todo
lo creo yo. O, ¿Acaso él me está inventado a mí? ¿Acaso él, si alguna vez vio que yo tenía un teléfono celular para tomarle una foto, sólo lo estaba imaginado? No creo, yo no existo en su mente. Soy menos que su gis con el que pinta y traza el mundo.
3 comentarios:
Para empezar me parece estupenda esta publicacion, me ata una gran amistad con el autor, es decir, ALVARO AVILA, pero desde luego mi opinion es completamente al margende dicha amistad, pues para ser objetivo se deben separar ambas cosas.me sorprende mucho la profundidad de las reflexiones del autor,ademas me llama la atencion porque su tema lo creo alrededor de una palabra muy poco conocida para la gran mayoria,como lo es solipsismo, (nunca la habia oido nombrar), y juega con las cosas abstractas que rodean nuestras vidas, y son muy importantes, como los sueños,y la vida es un sueño, como lo plasmo calderon de la barca,los pensamientos, La vida, la muerte, filosofar no es nada facil, por lo menos para mi. ademas esa foto, que yo la catalogo como una foto urbana de Pachuca con el enfoque que le da el autor, me parece formidable. ya habia leido algo escrito por Alvaro, pero aqui me sorprende la forma de jugar con varios conceptos.
no se si tengas mas escritos al estilo de este, si no es asi deberias escrivirlos con mayor continuidad.
La verdad soy muy limitado de vocabulario para explicar todo lo que creo que merece este articulo, pero como quiera que sea, se merece una felicitacion. esta es una humilde opinion de un servidor.
Jose Carrasco Lozano.
MAGNIFICO.
Mi querido amigo José Carrasco, no se trata de llenar de elogios ni agradecimientos esta página. Pero creo que tu amistad de tantos años, merece un comentario sincero y profundo. Gracias por tener esa perspectiva de la vida. Me complace mucho saber que aunque no tengo muchos amigos, los que tengo me apoyan. Un abrazo!!
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